de Ivelisse Rosario
El informe de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), que describe y narra las precariedades por las que atraviesan los reclusos de la Cárcel de la Victoria, las condiciones infrahumanas en las que viven los reos y la existencia de una “mafia” que cobra dinero por cada facilidad dentro del recinto, asegura que esa estructura ilegal mueve cada semana más de tres millones de pesos.
La entidad sostiene que allí opera “el negocio más rentable”, ya que no tiene que pagar impuestos ni empleados.
Juan Alberto Francisco Vargas, coordinador del Programa de Asistencia Jurídica de la CNDH y encargado de redactar el informe, expresó a Metro que esta mafia que funciona dentro del penal está dirigida por los policías y los jefes de bloques, que son aquellos reclusos que hacen la parte de encargados de celdas. “Es obvio que nada se mueve sin el consentimiento de las autoridades del penal”, indicó.
Manifestó que pese a que el Ministerio Público se ha negado a recibir el informe con sus conclusiones, la comisión persistirá en su denuncia.
“Seguiremos insistiendo en la eliminación de la Dirección General de Prisiones y lucharemos hasta que La Victoria y los demás centros de reclusión del país sean traspasados al nuevo modelo de gestión penitenciario”.
Qué dice el informe
Según datos de 2014, ocho mil 555 personas están recluidoas en La Victoria, de un total de 26 mil 350 reclusos que tiene el país.
La mayoría de la población en La Victoria esta formada por hombres entre 19 y 35 años, jóvenes que en muchos casos están condenados a penas de 20 y 30 años.
El informe muestra que para poder entrar al recinto es necesario pasar por una serie de pagos y “verificaciones”, que incluye tres chequeos.El primer registro, según los datos, consiste en entregar la cédula. Un policía hace el registro en una hoja y asigna un ticket, el cual hay que guardar para la salida.
Los participantes del recorrido destacan que “Lamentablemente este mismo policía que hace el registro, descuidando el reglamento y la forma, descaradamente les pide una colaboración con “algo”, que quiere decir, dame dinero”.
En el segundo chequeo, te revisan y te estampan en la mano o en el antebrazo un sello rojo con el nombre del penal; esto da paso al tercer chequeo en donde te piden la cédula y te ponen otro sello con el cual te dan acceso al penal.
Continúan narrando que en su visita sorpresa ya dentro del penal se trasladaron a la Unidad de Atención Primaria de Salud y una vez allí se dieron cuenta de que es necesario que sea intervenida con urgencia por las autoridades de Salud Pública, ya que más que una unidad de salud “parece un corral para cerdos”. El texto registra la impresión de que quienes allí están internados llegaron con alguna enfermedad y allí se agrabó por alguna infección relacionada con la insalubridad.
La travesía continúa. Salen de la unidad médica en dirección al patio y en ese momento alguien les informa que un nuevo recluso se había ahorcado. Se trataba de un hombre que le había quitado la vida a una vecina por un conflicto por una pared, un caso muy difundido en la prensa nacional.
La comida en la Victoria
El informe relata que hablando con los reclusos sobre cómo se sostienen y cómo hacen para alimentarse dentro del penal, contaron que hay un comedor donde la comida es gratis, que esta comida es preparada por un grupo de reclusos y es servida a los demás reos.
“Esta comida solo la comen aquellos que no tienen quien les supla una compra o dinero para comprar de la que venden dentro del penal”, según ellos la comida que dan en el penal gratis, a la que llaman “chao”, se compara con la comida para animales.
“Solo la forma en que es llevada a las celdas en cubetas hace que se parezca a desperdicio para puercos”, señaló el informe.
El costo de vivir en una celda más o menos digna
A la realidad de estar detenidos se le suma en no saber dónde dormir.
Según se dio a conocer cuando un preventivo llega a la penitenciaria de La Victoria, es llevado a una área conocida como “la planchita”, hasta tanto se le asigne una celda; si este elige una área determinada que tiene un costo, solo para que se le haga la solicitud de envío se deben pagar desde 500 hasta 30 mil pesos. Pero este no es el precio de la celda pues para dormir en una celda con cama debe pagar desde 250 pesos semanales hasta mil 500 pesos, solo por concepto de alquiler. Si decide comprar una habitación le puede costar desde 25 mil pesos hasta 300 mil pesos.
“Una habitación en los F1 (un área del penal) cuesta entre 40 mil y 50 mil pesos, al comprar tu habitación, o mejor dicho cama, porque en una habitación duermen seis personas; esto te evita tener que estar pagando alquiler y una vez cumplida tu pena puedes vender esta cama, solo que si no lo hace antes de salir pierdes tu derecho de propiedad y esta es vendida por un oficial del penal”.
Autoridades niegan mafia
El director de Prisiones, Tomás Holguín La Paz, rechazó ayer la denuncia de la (CNDH) de que existe en la cárcel de La Victoria una red mafiosa que recibe hasta tres millones de pesos semanales de los reclusos por pago de servicios.
“Lo primero que queremos decir es que no vamos a dar ninguna respuesta a esas declaraciones, ya que no nos merecen ningún tipo de credibilidad”
El funcionario dijo que esta cárcel se encuentra “en su mejor momento”.
Opinó que la denuncia de la CNDH mueve a suspicacia y destacó los trabajos que se realizan en esa prisión.
Autoridades
“La mafia está dirigida por los policías y los jefes de bloques que son aquellos reclusos que hacen las partes de encargados de celdas, pero es obvio que nada se mueve sin el consentimiento de las autoridades del penal”. Juan Alberto Francisco Vargas. Coordinador del Programa de Asistencia Jurídica de la (CNDH).
Buen gesto por la humanidad doliente
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